Un cuento corto Daniel H. Valsecchi Casimiro llegó cansado y enfermo a Polonia. El avión despegó del aeropuerto de Ezeiza, aterrizó en Frankfurt, después en München. Casimiro tuvo un fuerte dolor de cabeza. Con su equipaje, fue a la estación central de Varsovia. Casimiro no sabía hablar polaco. La vendedora de pasajes le escribió el precio en un papelito. Llegó a Cracovia, en la estación vio a un grupo de ebrios, vio a un grupo de soldados y se acercó a ellos. Llamó por teléfono a un taxista. Llegó y Casimiro en inglés le dijo adónde quería ir: please to the Student’s hotel Piast. El taxista fue honesto. Por la ventanilla del auto vio a un grupo de prostitutas rusas. Empecé bien mi estadía☺ El entusiasmo se terminó cuando llegó al hotel. Casimiro le mostró en la recepción a una joven polaca rubia, el certificado y la autorización para vivir allí. La recepcionista le advirtió. En el cuarto de al lado vive un negro (sic!). En todos lados maltrato. Casimiro le dijo a una funcionaria que conoció en Buenos Aires y estaba en Varsovia: qué lástima que Hiter perdió la guerra y Stalin no destruyó a Polonia. La respuesta fue la siguiente: no te preocupes ya te vas a adaptar al país. En 1999 tuvo una presión arterial de 190 grados. Fue al médico. Una doctora responsable que hizo lo que había que hacer. Se encontró con su promotor de tesis. Un idiota made in Poland. No le facilitó a Casimiro un ordenador. Tuvo que escribir su tesis a mano, como en el siglo XIX. Casimiro en el lectorium tuvo un gran dolor de cabeza. Via mail, le contó a un profersor el problema. Tómese un descanso enseguida. Es la enfermedad de los intelectuales. Una noche, caminando por la calle, en un parque Casimiro vio a una hermosa mujer abrigada. Se acercó a ella. Era una prostituta de ascendencia judía. Me llamo Ivona. Le dio a Casimiro un beso profundo. En un taxi fueron al hotel de estudiantes, en ascensor fueron al cuarto donde vivía Casimiro. Encendió la radio y preparó un té. Ivona se desnudó, se puso boca abajo. Alguien le hizo el culo☻. Ponete el forro para tu seguridad. Casimiró la garchó. Le escribió a un amigo que encontró a una «amiguita» para calmar sus deseos sexuales. El amigo le dijo: en caso de emergencia, hay que romper el vidrio. Una vez Ivona le dijo a Casimiro: yo nunca tuve un orgasmo. Dicho sea de paso, era casada tenía hijos, y el marido sabía. Fue garchada por casi toda la clase alta de Cracovia. Le preguntaba a Casimiro: ¿Puedo fumar un cigarrillo? Una vez estaba en bosque con un embarazo de ocho meses. Y Casimiro acariciaba y besaba el vientre de Ivona. ¿Cuánto tiempo? Preguntó Casimiro. El que quieras☻. En otro hotel para asistentes Casimiro se acostaba con Ivona. El 69. Casi siempre por el culo y a veces por el coño. En la calle Szlak – la calle de las prostitutas – Ivona estaba parada, vestida con una pollerita amarilla. Casimiro se acercó a ella. Estoy sin bombacha, podés comprobarlo. Casimiro metió su dedo en el ano de Ivona, diciéndole: va a haber $$☻. Una vez en el hotel, Casimiro besó los dedos de los pies de Ivona. ¡Me gusta, es placentero!☻ Una vez le mostró a Casimiro una foto que se tomó en Egipto. Sentada, con sus piernas esbeltas, sonriente, y con su culo reventado☺Le pidió 5 zł para hacer una copia. Nunca la hizo. Casimiro conoció a una jovata sensual rubia, con la sonrisa típica de una puta☺. En una casa, Casimiro con su verga rígida, y la jovata chupaba con pasión preguntándole: ¿cual es tu currriculum? En la calle Casimiro encontró a una ucraniania de 16 años. Viajó a Polonia para juntar plata vendiendo su cuerpo. Fueron con un taxista a una casa en Łagiewniki. El tachero la conocía y hablaba con ella. Se bajaron del auto. Entraron a la casa. Se desnudaron y la ucraniana le puso el forro a Casimiro con la lengua.☺ Casimiro tocó el ano de la joven prostituta. No le gustó mucho. Cerca de la estación central, Casimiro conoció a una prostituta vieja y flaca como una prisionera de un campo de concentración, pero calentona… una vez en un hotel. La mejor fue Natalia, oriunda de Rusia. Buenas tetas, buen culo. Le gustaba el fierro y chupar la verga. Le contó a Casimiro que en Moscú se vive muy humildemente con 1000 rublos. Muchas veces se acostaron y una vez le contó que los polacos tienen una verga de 8 cm☻. Con las mujeres de tu país no vas a tener ningún problema. Sentada frente a la puerta de una casa había una rusa hermosa. Una tal Eva. Su especialidad era chupar vergas. Gorda, el cabello rasurado y llena de tatuajes, chupaba la verga y escupía el esperma. A veces con Casimiro garchaban de parado. En una esquina de la calle Szlak había un grupo de prostitutas muy hermosas. Estaban disponibles. Casimiro quería llevarse a una al hotel de asistentes. El problema que en el hotel había más de cinco personas. NOTABENE: en Polonia no hay albergues transitorios. Atrás de un árbol no es una buena idea, sobre todo cuando hace frío. Y una tal Ana, hermosa y con ojos azules, quería un auto para garchar o para ir a un hostel. En la plaza una mujer hermosa muy elegante. Casimiro se acercó a ella. Sólo alemán. Casimiro pensó: en general con las prostitutas no se habla. Casimiro en Buenos Aires vio en el subte a una mujer muy hermosa. Quería que pagara una casa (?). Casimiro le dijo: vivo sólo. ¡No! Tenía hermanos y no quería tener kilombos. Con el pager le dijo a Casimiro: te recuerdo un montón. Después, con el celular la mujer le dijo: no sos un caballero. La respuesta de Casimiro fue la siguiente: vos no sos una dama. Casimiro en Cracovia yendo en el autobus a la escuela Przegorzały para aprender el idioma polaco, vio a una mujer rubia con ojos azules, que lo miraba fijamente. Se bajó del autobus y llegó tarde a la clase. Su nombre era Bożena. El diagnóstico. Si Casimiro hablaba, ella repetía lo mismo. Tuvo un novio borracho. Un camino que no lleva a ninguna parte. Un vez le prestó a Casimiro 100 zł para cruzar la frontera para prorrogar la estadía en Polonia por tres meses. Cagarse de frío a las 0300, esperando el tren en Petrovice u Karviné. La amenaza era la deportación. Una vez un tal Eker, lo llevó a Petrovice en auto. Con las luces fueron visibles las ruteras sonrientes☻. Casimiro le dijo: frená. No frenó porque era un marica. Casimiro conoció a una chica muy linda y delicada. Se llamaba María. Flaquita y de ojos azules, hacía el curso para ser profesora de español. Una vez le regaló café granulado y bombones, como agradecimiento por recibir «clases» gratis de español. Casimiro recibió una postal: que tengas buena salud y que la suerte no te abandone. María tenía un problema muy serio. El padre era un alcohólico empedernido. Muchas veces la policía lo traía a la casa. La madre proponía un régimen explotador para sus hijos, en lo que respecta al trabajo. En el hotel Żaczek, la madre ignoró a Casimiro. Encontró a un novio montañes. Quizás quería por medio del matrimonio aejarse de su familia. Tuvo lugar un encuentro entre la dos familias. No se si se quebró el hielo. María tenía miedo. Cuestión de clase. Pasó el tiempo, y contrajeron matrimonio. Una vez Casimiro llamó a la casa a la hermana para pedirle el teléfono de María. Y agregó: no soy polaco. Y se rió. Una falta de respeto. Casimiro perdió el contacto con María… Para los estudiantes que vivían lejos, un profesor de historia, siempre los invitaba para pasar la Navidad. Como regalo un calendario. Entre los estudiantes había una pareja oriunda de los Estados Unidos de América. El profesor les dijo: si quieren pasar la noche aquí tengo un cuarto de huéspedes. Uno de los estudiantes no pudo tener una idea peor. Preguntarle a una mujer entrada en años si se acuerda de la ocupación nazi-alemana. Me acuerdo… Cantos górales y despues en taxi hacia el Wawel – la misa de Navidad. Casimiro en Buenos Aires dio su último exámen de inglés. La comisión examinadora – todas mujeres – le formularon una pregunta en inglés: elija un tema. El general Stanisław Sosabowski. Casimiro leyó el libro Freely I Served. El general Tadeusz Ted Kutrzeba, le dijo a Sosabowski: estoy muy satisfecho con su la labor en la Escuela Superior de Guerra. Pero, antres de decirle adiós, quisiera darle un amigable consejo. Usted es una persona que habla sin tapujos, tiene una mentalidad crítica. Son buenas cualidades. Pero no olvide que muchos seniors oficiales pueden resentirse. Cuide sus pasos. Sonriente, el general Kutrzeba estrechó la mano de Sosabowski. Cuando estaba en el Colegio Militar de la Nación, Casimiro fue crítico y hablaba sin tapujos. Bad way in the military! Hizo bien, dijo una de las profesoras sonriente. Las otras tambien sonrientes. Una de ella vio la película Freely I Served - la famosa escena del mapa. Sólo quiero estar seguro de que lado está. Durante la reunión durante la Nochebuena, Casimiro le preguntó al profesor, si tenía algún texto acerca del general Sosabowski. Tenía uno. Enjoy it! Pasó el tiempo. Casimiro buscaba trabajo. Se contactó con el mismo profesor para preguntarle si hay posiblidades de trabajar. Via mail, de mala manera escribió: desgraciadamente no veo posibilidades de trabajo. Los cursos están cerrados y el número de estudiantes no aumenta… En Cracovia Casimiro pasó hambre. Se terminó la beca y no tenía ni un grosz. A las 0300 Casimiro se levantaba para recorrer todas las cocinas del hotel para becarios, buscar algo comestible. Se dirigió al Kopiec Krakus para juntar manzanas y llevarlas al hotel. María le dijo: pasas hambre. Te voy a ayudar: la mitad de mi almuerzo. Un becario le prestó plata para que Casimiro compre algo. Otro becario lo mismo. Pero tuvo que devolverle la plata. El idiota del promotor en vez de conseguirle un trabajo, le dio un bono para hacer compras en un supermercado. Casimiro adelgazó 10 kg. Fue a la dirección del curso de polaco. Le dio un café y una medialuna. Y le consiguió otra beca. Se acabo la hambruna. Una de las profesoras, con tono burlón le dijo a Casimiro: Pan wygląda źle (tiene un mal aspecto). ¡Así tratan a los extranjeros en Polonia! ………………………………………………………………………………………………………… Casimiro siguió con sus calaveradas. Una prostituta en un parque se levantó la pollera y lucía una bombacha color blanco. Se adentraron en el parque muy lejos. Casimiro la garchó de parado☺. Casimiro se encontró en la calle Westerplatte con una prostituta entrada en años, con labios carnosos. Fueron a una casa y la prostituta dijo: tenemos a un invitado. Había un perro y comenzó a ladrar. Tuvo lugar una gresca. Casimiro se acordó de algo parecido que ocurrió en Buenos Aires. La grachada tuvo lugar en cuarto ☻. Conoció a otra. Cuando vio la verga de Casimiro dijo: kawałek (¡Qué pedazo!). Y agregó: sos muy delicado. En cierto momento las prostitutas callejeras desaparecieron. Casimiro vio una prostituta con buenas tetas, frente a la puerta de una casa. Lo que hay en los parques es tasajo. Las prostitutas están en los clubes, y en la red. Ofrecen sus servicios: garganta profunda, masturbación y ducha conjunta. Muchas tienen el culo hecho☻, La edad y el precio por los servicios. Los forros se repartían en los hoteles para estudiantes. Ahora mejoraron los servicios. En la cuidadela estudiantil hay un automático con todos los chiches para calmar la calentura☻Y el domingo los estudiantes van a la iglesia. La porno está en la red. Gratis. A la noche, las estudiantes que viven en el académico, conectan el ordenador☻. Un detalle. A diferencia de Buenos Aires, en las confiterías no hay prostitutas. Salir de levante en Cracovia de noche es una misión imposible. Casimiro encontró a su bebota Leonor en la calle. En Cracovia de noche o de día, una pareja de novios, de la mano. Llegó, tarde pero seguro, la tanga. Si la pollera es transparente, el culo es visible☻. Tirarse un lance, otra misión imposible. Una voz extraña: Casimiro estaba parado en la calle paralela al Albergue Warnes. Encontró a un mujer y empezaron a conversar. ¿el tema? Una larga caminata y nada… Casimiro quizás quiso levantársela☻. En las universidades polacas no hay sala de profesores. Una de las materias de la carrera de abogacía era expresión oral y escrita. Casimiro escribió un referat acerca de la ideología. El profesor consideró que era un buen escrito, hay fragmentos que lo enriquecen. Empero, puede ser considerado como otra ideolgía. El profesor invitó a sus alumnos y sus alumnas a una confitería para hablar acerca de literatura. Otra voz extraña. En Toay Laura, la hija de un teniente coronel planchado. Laura estaba recaliente con un oficial sumariado. Había muchos obstáculos. Un mayor le dijo: el jefe de batallón no quiere que le partan a la hija☻. Cuando Laura corría, en la mente del oficial la melodía tocada por una flauta (La segunda sinfonía de Mahler, primer movimiento). Una manosanta se metió en el tema. Le dijo al oficial. Laura está triste. Pasó el tiempo Laura se casó tuvo un hijo, un poco fea… Casimiro daba clases de filosofía antigua en colegio cuatro pisos sin ascensor. Un de sus alumnas, Anna, rubia, sentada en la primera fila, abierta de piernas, mirando fijo a Casimiro☺. Si hubiera querido algo concreto, al grano. Esperar a Casimiro en la calle. Pasó el tiempo. Casimiro vio a Anna con sus dos tetas grandes. Y pensó: ¿Por qué no te abrís de piernas ahora? Otra voz extraña. Casimiro estaba metido (amor platónico que le dicen) con la profesora de historia. Era la sobrina de un ministro. Casimiro escribió una ponencia: la personalidad política del general D. José de San Martín. La profesora le preguntó: Tiene un propósito ¿lo escribiste sólo? Sí. La profesora tenía un novio. Casimiro tenía 16 años. Los alumnos estaban recalientes con la profesora de física, una bebota con cara de tramposa que volteaba☻ Casimiro leyó en Polonia La paga de los soldados de William Faulkner. A la mente de Casimiro vinieron dos películas: la primera, la acción se lleva a cabo en los Estados Unidos. La trama es más o menos así. Negros aviadores. Una escena: un avión tiene una avería, desciende en una autopista. Hay negros engrillados. Y uno de ellos dice asombrado: los negros vuelan. En otra escena, la esposa de Roosevelt, con mucho gusto quiere subir al avión. En Europa, la pelea de perros. Los pilotos negros son muy efectivos. Un piloto blanco lleva consigo una botella de whisky, como presente. Cuando ve que el piloto es negro dice: ¡No puede ser! Lo rechaza. Más tarde, se dio cuenta de que todos están en la cubierta del mismo barco, se amigan y reconoce la destreza del piloto. Otra voz extraña. Casimiro le dijo a su mamá: Yo siempre quise volar. La respuesta fue la siguiente: vas a volar de la patada que te voy a dar. Casimiro se dedicó al aeromodelismo por poco tiempo. La otra película acerca de la US Army en Inglaterra. Más de un inglés dijo: los yanqees toman de más, fornican (garchan) de más y están de más. Cuando llegaron las fuerzas americanas, un inglés dijo: dentro de pocos años vamos a ver a pequeños mestizos corriendo por las calles. En otra escena un negro tiene en su mano una navaja. ¡Para defenderme de los blancos! Una mujer inglesa le hace los cuernos a su marido embarcado y un negro la embarazó. Fue juzgado y condenado a muerte. La mujer recibe la carta, se sienta y llora. Pasó mucho tiempo después de la finalización de la contienda, a una casa se acerca un auto. Se baja un negro (un encuentro de veteranos) y la recibe la mujer. Lo invita a tomar una taza de té. La mujer le dice que hace mucho que se divorció. El negro le da una carta escrita por el negro ejecutado. Esto es para usted. Otra voz extraña. En un departamento mal construido, Casimiro, la abuela y la mamá viven allí. En el piso 7 ascensor, vivía una negrita. La mamá de Casimiro formuló una pregunta idiota: ¿le tenés miedo porque es una negrita? Encerrrado en el baño Casimiro escuchó el grito de su madre: ¡Y tiene un miedo! Una vez en Nochebuena, la abuela le dijo a Casimiro: ¡poné alguna música! La mamá pegó un grito: ¡que ni se le ocurra! Al día siguiente la mamá acostada en la cama le dijo a Casimiro, llorando: no te quise arruinar las fiestas, ¡te lo juro! El abuelo solía arruinar la Navidad. Por este motivo, Casimiro cuando hizo el servcio militar, le pidió al jefe de compañía. Quiero pasar la Navidad en el cuartel. Ya el puesto estaba cubierto. Y antes del servicio militar, cuado las clases terminaban, Casimiro pensaba, ¡uy! Tengo que volver. Casimiro cumplió su deber de hijo, la llevaba al hospital. La mamá le pagó con mala moneda. Cuando la mamá de Casimiro falleció, hizo algo espantoso. Le regaló el reloj de pulsera a una prostituta. Y muchas prendas de vestir fueron un regalo para una de sus amantes. Casimiro rápidamente transformó el departamento en un burdel... Casimiro ve a una becaria mulata y se recalienta☻ Hay muchas becarias y becarios, caminando por las calles de Cracovia. La pregunta del millón: ¿por qué no hay profesores mulatos o abogadas mulatas en las casas de altos de estudios en Polonia? ¿¿Conservar la pureza racial o la presuposición de que son inasimilables…?? UNA PREGUNTA HASTA EL DÍA DE HOY SIN RESPUESTA